lunes, 9 de mayo de 2011

El Scudetto vuelve a ser rossonero

Tras siete largos años de sequía el Milan volvía a conquistar sobre el césped un nuevo título de liga. Es ya el decimoctavo Scudetto en las vitrinas rossoneri de San Siro, que además cobra un mayor valor si cabe ya que termina con la hegemonía de los últimos cinco años en los que la fiesta se ha vivido en el otro lado de la ciudad. Fue en Roma, magnífico escenario, donde los chicos de Allegri lograron el punto que necesitaban para festejar tras meses de trabajo. El partido no fue gran cosa y aunque el Milan tuvo sus opciones el empate siempre pareció el resultado más probable.

Para recuperar el trono doméstico, Berlusconi se encomendó a la juventud y el juego alegre de Massimo Allegri, que venía de hacer un notable trabajo durante años al frente del modesto Cagliari. Reforzó el equipo en ataque con las llegadas de Robinho -tras su frustrado paso por el fútbol inglés- y el díscolo Zlatan Ibrahimovic que regresaba a Milán tras no congeniar con la personalidad de Pep Guardiola en Can Barça. Para el centro del campo se pensó en la juventud y fuerza de Kevin-Prince Boateng como complemento a unos Gatusso, Pirlo y Seedorf ya en decadencia e incluso se firmó al joven Amelia para la portería. En el mercado de invierno Cassano reforzaría la nómina milanista para cubrir la baja de Pippo Inzaghi, lesionado para toda la temporada en el partido de Champions ante el Madrid tras anotar dos tantos.

El equipo comenzó la temporada como un tiro y pronto se postuló como máximo favorito al Scudetto aprovechando el mal arranque del Inter de Benitez y el anclamiento de una Juve que no acaba de resurgir. Incluso en Champions el equipo pasó la primera fase de grupos en uno de los más complicados, junto a Madrid, Ajax y Auxerre. Sin embargo, y tras alzarse con el titulo de campeón de invierno el equipo se atascó y, unido al resurgir del Inter junto a un voluntarioso Napoli, se complicó la vida dilapidando gran parte de su renta. La eliminación en Champions a manos de un mediocre Tottenham hizo temer lo peor pero la squadra milanista supo finalmente reponerse y afrontar la recta del campeonato con garantías.

Apenas un par de días después de festejar en el Olímpico la secretaría técnica ha comenzado a dar las primeras pinceladas de lo que será el Milan 2011-2012 con los fichajes de Taiwo (25), procedente del Olimpique, y Mexes (29), de la Roma. Dos refuerzos de garantías para la defensa rossonera que se unen a la continuidad de Ibrahimovic, por el que el club lombardo pagará la opción que tenía firmada. Son los primeros pero a buen seguro que no serán las únicas adquisiciones de un club que quiere recuperar la grandeza perdida. Ya lo ha conseguido en Italia, y ahora quiere hacerlo en Europa.

No hay comentarios: